El piloto de Concepción del Uruguay cerró una buena carrera en un fin de semana que se presentaba mucho más complicado de lo esperado. El viernes quedó muy lejos en la primera tanda clasificatoria, ya que un despiste previo a cerrar una vuelta rápida le impedía tratar de luchar más adelante. Con un tiempo de 1’39”56/100 se ubicaba en la posición cincuenta y tres a 5”81/100 del parcial poleman Juan Manuel Silva.
El sábado no era muy distinto en la performance del Ford Falcon Nº 98. Si bien lograba bajar considerablemente el registro del día anterior, la falta de potencia en el impulsor de la máquina dejaba al Pope sin muchas chances de aspirar a ir para adelante. Con un tiempo de 1’35”31/100 se ubicaba en la posición 40 de la clasificación general, quedando a 1”78/100 del “Pato” Silva, quien se quedó con el primer punto en juego.
Bonelli largaba la primera serie desde la séptima fila, la cual compartía con Ezequiel Bosio. El piloto entrerriano no pudo escalar demasiado y finalizó la batería en la posición catorce por lo que se ubicó en la fila diecinueve en la grilla de la carrera final.
En la competencia principal, el Pope se limitó a no cometer errores, aprovechar las deserciones de los rivales y superar a otros cuando era posible, hasta lograr escalar veintiuna colocaciones cuando cruzó la bandera a cuadros.
“Cerramos un fin de semana mucho mejor de lo que pintaba porque no pudimos tener el arma necesaria como para aspirar a pelear más arriba. La falta de potencia en el impulsor nos sigue haciendo penar, por lo que para la carrera de Paraná no descartamos la posibilidad de alquilar un motor”, expresó Bonelli.
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